Wuppies.
Que la moda es algo cíclico y que conviene no tirar nunca nada por si acaso es de todos bien sabido. En esta ocasión lo que ha vuelto es el pom-pom, un complemento ideal para adornar los bolsos y mochilas y así darles un poco de color o incluso que parezcan otros y así tenemos dos en uno.
Su artífice fue Karl Lagarfeld con sus Fendi Bag Bugs, unas bolitas que cuestan más que un bolso, los hay por 1.000€ e incluso con su forma.
La cara de Cara lo dice todo.
Más asequibles son los de tiendas como Pom Pom Poddle, las nacionales Tita Madrid o Miguel Marinero. O sino siempre tendremos las opciones de Inditex, Asos o Topshop y las múltiples tiendas online.
Bershka.
O sino, siempre podemos recurrir a hacernos uno propio, para ello hay montón de tutoriales en la red, en especial en Pinterest.
Como complemento le veo su gracia, si el precio no es mayor que el objeto. Eso sí, yo cada vez que los veo me acuerdo de estos graciosos bichitos, los wuppies del Padre Abraham, una canción que escuchaba en bucle de pequeña en el tocadiscos de mi abuela.
(Solo la he podido encontrar en alemán, pero el sonido galáctico es igual).
Y siguiendo con canciones qué tal "Yo tengo mi pom pom, pom pom".
¿Qué os parecen a vosotras?
¿Os atrevéis con alguno?
¿Os atrevéis con alguno?
FOTOS: GOOGLE IMAGES, PINTEREST
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